Atlético Nacional arrancó con pie derecho la Liga BetPlay-2 tras imponerse con autoridad 3-1 frente al Once Caldas en el estadio Atanasio Girardot. Con una presentación sólida, dinámica y efectiva, el equipo verdolaga comenzó a escribir una nueva historia bajo el mando del técnico argentino Javier Gandolfi, buscando dejar atrás las tensiones del semestre anterior y recuperar el respaldo de su afición.
Desde el primer minuto, Nacional mostró una actitud distinta: presión alta, posesión efectiva y transiciones rápidas. El equipo paisa se adueñó del ritmo del partido y encontró el primer gol gracias a una jugada colectiva que terminó en una definición certera dentro del área.
Pese al empate temporal del Once Caldas, el Verde respondió con contundencia y se fue al descanso con ventaja. En el segundo tiempo, un tercer tanto selló el 3-1 final, dejando una grata impresión en su debut.
Más allá del marcador, lo que realmente marcó la noche fue la conexión con la hinchada. Aplausos, cánticos y una actitud distinta en la tribuna hicieron pensar que este puede ser el primer paso para recuperar la confianza perdida en torneos anteriores.
El técnico argentino vivió su estreno con intensidad desde la línea. En rueda de prensa fue claro:
“Esto apenas comienza. Hoy se hizo un buen trabajo, pero lo importante es sostenerlo en el tiempo y seguir creciendo. Lo que más me gustó fue la actitud del equipo”.
Con los primeros tres puntos asegurados, Nacional se prepara para su siguiente reto. El objetivo es claro: mantenerse competitivo, recuperar su esencia ganadora y volver a enamorar a su hinchada. Once Caldas, por su parte, tendrá que corregir errores para no perder ritmo en la liga.
Atlético Nacional empezó con fuerza la Liga BetPlay-2. Más allá del 3-1 sobre Once Caldas, mostró actitud, juego y señales de reconciliación con su gente. Si mantiene esta línea, el Verde tiene con qué ilusionarse.
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